Podemos hablar de un texto bastante motivador ya que las positivas palabras del autor son dignas de ello. Habla de ciudades modernas que satisfacen las necesidades de los habitantes y que  con su complejo funcionamiento  son más diversas, vivas y mejor pensadas.

Esta idea se resume muy bien en una de sus respuestas en esta entrevista: " El buen urbanismo es una cuestión de quererlo, casi, de alguna manera, desearlo, y ahora no hay, escasea la imaginación de futuro, no hay tal voluntad. Y sin voluntad no hay deseo, y sin deseo no hay calidad."

Habla de ciudades que no son estéticamente bonitas pero que si son mucho mas funcionales que lo son algunas ciudades históricas. Por eso defiende que necesitamos proyectos ambiciosos que emocionen y conmuevan, que no sean inocentes con un programa diverso y que nos devuelvan las ciudades.