Desde el principio de los tiempos, han sido los arquitectos los principales artífices y moldeadores de las ciudades. Por lo tanto tenemos una importante labor con respecto al resto de la población, un deber de darnos a esas personas por medio de nuestro trabajo, de mejorar sus vidas contribuyendo en esa construcción de la ciudad.

Entonces, al ser nuestra profesión algo para mejorar las vidas de la gente, la aportación que un arquitecto haga a la ciudad siempre tiene que ser para mejorar las condiciones que ya existían antes, ya sea con un proyecto urbanístico o con un edificio. Para realizar algo peor que lo que ya estaba, mejor no hacer nada. No sólo hablo de la funcionalidad que debe tener la intervención, que obviamente es algo principal, sino la belleza de ésta. La imagen que da un edificio, por ejemplo, es importante, ya que al pasar delante de éste puede hacer que el paseo de una persona resulte agradable o no.

En conclusión, los arquitectos somos meros empleados de la población, trabajamos por y para ellos y por lo tanto es nuestro deber mejorar sus vidas con nuestras aportaciones a la ciudad.

*Fuente de la imagen: http://www.la-alhambra.org.es/album/plaza-nueva-granada-mirador-vista-aerea.php *