El texto nos habla de como el urbanista, como profesión, se ha ido perdiendo poco a poco en el tiempo, justo quizás, en el momento que más hace falta y como nos hemos dejado llevar por el modernismo. Pienso que es hora de dar un paso más allá, si, el modernismo esta muy bien, pero en su época, ahora nos toca replantearnos todos estos conceptos y empezar a crear ciudades más humanas y contextualizadas, teniendo en cuenta lo antiguo, lo moderno, el carácter y la esencia de cada lugar y cada barrio.