En la época de Unwin había dos posturas muy diferenciadas en cuanto a cómo hacer urbanismo: el "formalismo" (basado en la legislación, el trazado,...) y el "informalismo" (basado en el lugar). Unwin entonces, se coloca en el centro e intenta que ambas posturas convergen en una sola forma de entender el urbanismo sumando ambas posturas, ya que no son incompatibles según el autor. 

Obviamente nada es blanco o negro,y la ciudad es un abanico de infinitos grises, como dice Unwin, existe tanta belleza formal como informal en las ciudades. Pero si nos encontrásemos entre la espada y la pared, que en algún punto del proyecto no pudieran convivir estos dos enfoques, sería interesante debatir sobre cual debería primar en ese punto.

También me llama la atención cuando, casi al final del texto, Solà Morales nos habla de algunos de los temas de Unwin sin profundizar mucho. Temas como los bordes, los accesos, las calles mayores, las calles menores, y otros que sería también interesante debatirlos en clase.