El arte de planificar el sitio, por Kevin Lynch

Creada el 17 de Enero de 2016 a las 09:14 por HipodamodeMileto

Proyecto: Urban Games 2015
Tema: Diálogos
Coordinadores: abarca dacama

Valoración general

0/5 (0 votaciones)

Valoración de coordinadores

0/5 (0 votaciones)

Descripción

Comentarios.

EntradaBlog

Entrada de Blog

Planificar o no planificar. A la vista de que los lugares más bellos parecen haber nacido de forma espontánea, ¿por qué planificar? La respuesta es: la escala. La complejidad de la sociedad actual hace necesario planificar los emplazamientos de algún modo. Es evidente que hay una gran diferencia entre un poblado neolítico destinado a albergar a cien personas sin ningún tipo de instalaciones y una urbanización para miles de habitantes a los que hay que dar unos servicios.

El estudio del emplazamiento viene de antiguo. Aunque la experiencia en este campo tenga muchos siglos, no por ello hoy la elección del emplazamiento de un núcleo urbano se hace correctamente.

Planificar es organizar el entorno como soporte del comportamiento humano, va más allá del diseño urbano. Hay que recalcar la palabra entorno porque hay una íntima relación entre él y el hombre, de manera que si el primero se deteriora, ocurre lo mismo con calidad de vida del segundo. Se trata de un proceso iterativo: no se pueden establecer los propósitos u objetivos del planeamiento hasta que no se conoce el terreno, y una vez se conoce el terreno se pueden establecer estos propósitos. Esto es evidente porque no todos los emplazamientos admiten todos los objetivos. Estos objetivos son específicos y particulares, y debe ser fácil comprobar su consecución. Utilizando los objetivos correctos, se puede discriminar entre soluciones. Cómo se haga esta discriminación, y en suma, cómo se haga el planeamiento, depende de la destreza de los diseñadores, y ésta en buena parte depende de su experiencia previa.

Como comentario final, a mi juicio, si bien la planificación es imprescindible, cuanto más perceptible sea más dificultades le genera al diseñador para generar sentimientos como sorpresa en los usuarios. Un entorno monótono en su trazado, como puede ser un ensanche, obliga a un mayor esfuerzo creativo a la hora de diseñar un edificio que un entorno con encanto, como puede ser un pueblo medieval.

 

Fotografía: Kevin Lynch. Fuente: http://www.plataformaurbana.cl/

 

 

 

Comentarios

Aún no hay comentarios para esta entrada. ¡Sé el primero!


Accede o regístrate para comentar y puntuar la entrada.