La geometría es claramente la herramienta principal para originar la ciudad, aunque intentemos alejarnos de ella siempre está presente en mayor o menor medida. Esta geometría es la que aparece de forma inconsciente en los ejes que configuran las ciudades, ejes que la jerarquizan y la ordenan.

Como vemos en los ejemplos que  se nos muestran la geometría se encontraba desde un principio marcando los ejes principales de las ciudades, como el Cardo y Decumano. Pero, ¿todos los ejes que hemos originado se comportan como dichos ejes?, ¿Cuándo sabemos que un eje está respondiendo bien a la ciudad?

Sencillamente que es lo que nos mueve a trazar un eje por cierto sitio, éste es claramente el acto más característico quizás desde un punto urbano, son las condiciones del lugar, o la separación de distintos barrios, o simplemente la unión de distintas zonas. Una cosa está clara y es que el eje no debe surgir así como así, es un proceso de análisis y conocimiento del lugar, tanto de un punto de vista actual y mirando hacia el futuro. Como cualquier propuesta urbana está idea debe estar clara.

Pero un eje no podemos mirarlo desde una perspectiva “en planta” por así decir sino también desde el punto de vista más común a todos, el humano, en cómo vamos a percibir estos ejes, si somos conscientes de su importancia o si de verdad creemos que la tiene.

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