El ejercicio se desarrolla sobre una ventana de 20x20 cm que contiene un fragmento de  la ciudad de Edimburgo a escala 1:2000:

A continuación la topografía inventada con líneas de cota cada metro, regruesadas cada cinco. Contiene pendiente en varias direcciones y un río que cruza de forma arbitraria la ventana descrita:

En este caso, la composición de la trama urbana cambia bastante:

Vemos que la ciudad se desordena considerablemente y pierde completamente su identidad.

Tras un estudio más profundo de este fragmento de Edimburgo, vuelvo a dibujar la ventana añadiendo nuevos elementos que no fueron apreciados anteriormente:

Vemos una configuración más detallada, sobre todo los accesos residenciales.

Para la topografía, el río pasa por el eje principal del fragmento, y a los lados el terreno va elevándose. Se añeden las cotas de cada línea.

Con este terreno, el río constituye el eje principal hacia un hito elevado, que se desvía cuando llega a él. Esto provoca la división de la zona verde que precede a dicho hito.

Esta disposición de la trama, en contraposición con la anterior, refuerza el eje principal y el hito urbano sin que la ciudad no parezca otra totalmente distinta.