En este artículo el autor nos habla de una ciudad completamente distinta a la que conocemos hoy en día, tal y como nos muestra el título, se hablará de la ciudad del futuro, una ciudad nueva, evolucionada y tecnológicamente superior.

Gracias a esta, la vida como se conocía ha ido evolucionando y proporcionándonos una mejor calidad de vida. Aunque también nos hace reflexionar sobre que el progreso no significa industrialización, ni grandez ciudades que no dejan lugar al entorno.

Todo lo contrario, como se dice en el artículo, debemos dejar espacio para zonas verdes y colecticas, y ya no solo dejar una superficie mínima, sino que cada vezos metros destinados para ello sean mayores, llegando a aparecer bosques en las grandes capitales y una gran atisbo de parques y praderas .

El futuro, sin lugar a dudas nos regalará mucha comodidad, pero no debemos olvidar que, aunque la tecnología nos facilite mucho la vida, tenemos la obligación de mantener muchas de nuestras costumbres y rutinas pasadas.