Definiría este texto como una especie de resumen de todos los ensayos que hemos visto con respecto al urbanismo.

Se trata de un nuevo urbanismo y se plantean una serie de reflexiones que pueden ser aplicados tanto al momento actual como a un futuro próximo que quizá está no muy claro en este campo. Un urbanismo que acoja toda disciplina, que dialogue con lo social o lo político, se amolde e impongan, cree riqueza y sensación, o sea reflexivo, participativo.           

Desde mi punto de vista y un poco a modo de cierre, creo que la arquitectura no debe olvidarse del pasado, debe atender al presente y siempre pensar el futuro. El tiempo es la cuarta dimensión de los proyectos. Esto aplicado a cada elemento específico acabará dando lugar al conjunto que conocemos como urbanismo, el cual aplicado a la ciudad debe ser pensado pero espontáneo, no cerrarse.